Shiatsu para embarazadas

El shiatsu es una técnica de masajes japonesa, que se realiza en zonas del cuerpo específicas en donde suele acumularse el estrés y la tensión, logrando de esta manera prevenir ciertas molestias y/o enfermedades.

Esta técnica puede aplicarse durante el embarazo, siempre y cuando se tomen algunas precauciones. La más importante de ellas es la elección de un profesional que sepa qué movimientos y en que zonas puede trabajarse durante este período tan especial. Otro aspecto a tener en cuenta es la previa consulta con el médico obstetra quien deberá autorizar o no la práctica de dichos masajes.

El profesional tendrá en cuenta el embarazo y el trimestre en el cual se encuentre la paciente para realizar los diferentes movimientos y presiones y trabajando en los meridianos adecuados ya que hay zonas que es conveniente evitar durante el embarazo.

El shiatsu puede resultar muy beneficioso para la mujer embarazada ya que, dependiendo de la comodidad de la misma, los masajes pueden realizarse tanto sentada como acostada. De esta manera se puede dar shiatsu en los músculos de la espalda y alrededor de la columna.

Esto no solamente ayuda a aliviar las molestias corporales provocada por las diferentes posturas y por el peso del cuerpo, sino que además ayuda a aliviar las nauseas matinales y sus movimientos ayudan a la circulación sanguínea mejorando las hemorroides y venas varicosas.

Por lo general, la mujer embarazada suele sufrir ciertos malestares debido al aumento de peso y las diferentes posturas que se van adoptando a medida que el embarazo avanza.

Estas molestias suelen ser hinchazón de piernas, pies y tobillos, mala circulación, dolores de ciático, dolores lumbares, aparición de varices, malestares estomacales, retención de líquidos y debilidad del riñón entre otras y el shiatsu puede ser muy beneficioso para aliviar y mejorar estos síntomas.

Además de calmar estas molestias, el shiatsu ayuda a reducir el estrés y la ansiedad propia de esta etapa, ayuda a aprender a relajarse tanto corporal como mentalmente, a conseguir un equilibrio corporal de las zonas afectadas y a nutrir la sangre, entre otros.

Por todo lo dicho, si no existe contraindicación médica, son muchos los beneficios que el shiatsu puede otorgarle a la mujer embarazada.