
El tema de los desodorantes versus los antitranspirantes está rodeado de mitos y verdades, sin embargo nunca se deja bien en claro si uno es mejor que el otro o si alguno de ellos causa daños en la piel. Veamos cómo actúan y aclaremos algunas dudas.
La piel del cuerpo necesita de ciertos cuidados y el cuidado de las axilas no debe quedar exento. Pero a la hora de elegir desodorantes o antitranspirantes siempre surgen dudas en cuanto a su efectividad, sus componentes y los posibles efectos que pueden causar en la piel y en la salud.
Tanto los desodorantes como los antitranspirantes son utilizados para evitar el olor a transpiración, pero existen algunas diferencias entre ellos que vale la pena mencionar.
Los desodorantes están específicamente diseñados para ocultar o enmascarar el olor a sudor, es decir que simplemente actúa como perfume ya que el mismo no evita la transpiración. Suele tener una duración aproximada de 12 horas y puede ser utilizado por todo el cuerpo ya que no obstruye los poros. Los desodorantes además del perfume contienen dentro de sus componentes etanol encargado de disminuir el olor que produce la sudoración por medio de las glándulas apocrinas. El etanol es un tipo de alcohol que además tiene la propiedad de actuar como antibacteriano.
Los antitranspirantes por su lado están diseñados para evitar la sudoración y esto es gracias a que están compuestos por hidróxido de aluminio, encargado de disminuir la secreción de las glándulas apocrinas. Además los antitranspirantes también actúan como antibacterianos pero con mayor eficacia que los desodorantes y tienen una duración de entre 12 y 24 hs. de acción. Es importante aclarar que los antitranspirantes obstruyen los poros con lo cual no se indica utilizarlo en todo el cuerpo.
Existen muchos mitos que aseguran que el uso de antitranspirantes puede causar cáncer de pecho debido a la obstrucción de los poros, lo cierto es que especialistas en dermatología aseguran que aún no existen pruebas científicas sobre este tema.
Podríamos decir entonces que se puede utilizar tanto desodorantes como antitranspirantes, lo importante es utilizar lo que cada persona necesite. En la pubertad es por lo general cuando comienza el uso de desodorantes ya que los cambios hormonales comienzan a originar los primeros signos de olor a transpiración. Para esta etapa los especialistas recomiendan la utilización de desodorantes que ayudarán a disimular el mal olor, además es muy importante la higiene de la zona.
Pasada esta etapa, cada persona podrá elegir el uso de desodorantes o antitranspirantes de acuerdo a sus necesidades ya que hay personas que prácticamente no sudan con lo cual prefieren utilizar desodorantes y aquellos que sudan en exceso o realizan mucha actividad física se inclinan por los antitranspirantes.
Hoy en día la mayor parte de los antitranspirantes vienen combinados con desodorantes y dan muy buenos resultados.
Para aquellas personas de piel sensible, lo ideal es utilizar productos sin aroma y sin alcohol para evitar irritaciones ya que cuanto más perfumados sean más posibilidades de irritaciones existen.