Por lo general solemos ocuparnos del cuidado de nuestras manos, dejando olvidados a nuestros pies. El cuidado de los pies es muy importante y aquí te enseñaremos a cuidarlos y embellecerlos en unos pocos pasos.
Los pies son los que sostienen el peso del cuerpo durante el día y por lo general sólo nos ocupamos de ellos cuando sentimos alguna molestia o cuando se acerca el verano y queremos usar sandalias y ojotas. Sin embargo basta con dedicarle algunos minutos para lucir unos pies espléndidos y bien cuidados.
A continuación enumeraremos los pasos para conseguirlo:
- Para comenzar lo primero que debemos realizar es, si lo hubiere, retirar el esmalte con un algodón embebido en acetona o quitaesmalte.
- Preparar un recipiente con agua tibia al que se le puede agregar un puñado de sal gruesa, aceites esenciales o jugo de limón. Luego colocar allí los pies y dejarlos reposar entre 15 y 20 minutos para ablandar durezas y cutículas. Retirar del agua y secar bien.
- Si existiesen durezas o callosidades se puede pasar una piedra pómez o una lima de pies en forma circular para removerlas.
- Con un palito de naranjo remover las cutículas empujándolas hacia atrás y evitando cortarlas ya que al cortarlas posiblemente crezcan más gruesas.
- Las uñas de los pies deben cortarse con un alicate en forma recta y luego utilizar una lima para redondear las puntas. Es importante no cortarlas demasiado para no lastimar la piel y evitar cortar o limar demasiado las puntas ya que al crecer pueden encarnarse, es decir incrustarse en la piel.
- Una vez que las uñas estén limadas y cortadas, se debe colocar una crema para pies y realizar un breve masaje que incluya los talones, la planta, el empeine y los dedos.
- Pasar por las uñas un algodón embebido en acetona o quita esmalte para retirar la grasitud que la crema pudo haber dejado sobre las mismas.
- Para finalizar esmaltaremos las uñas, se puede optar por algún color o simplemente colocar brillo, calcio o una base traslúcida. Para realizarlo se puede colocar un separador de dedos o de lo contrario bolitas de algodón entre ellos para evitar que se encimen y de ésta manera poder esmaltar con mayor facilidad. Esmaltar con el tono elegido y dejar secar.
Con estos pasos sencillos se puede lucir unos pies cuidados y prolijos, dedicándole solo algunos minutos por semana.